martes, 25 de noviembre de 2014


ENSAYO ACERCA DE LAS TEORIAS DEL COMPORTAMIENTO Y DESARROLLO ORGANIZACIONAL EN EL CONTEXTO DE LA GERENCIA EDUCATIVA. 

Al momento en que nos referimos a una organización se estaría hablando de un grupo de personas que se encuentran coordinadas con el fin de alcanzar actividades que se han planteado. Si reflexionamos un poco este término de organización está presente desde nuestros hogares hasta llegar al trabajo ya que todos formamos parte de una organización. También es importante resaltar que cada organización debe estar sujeta a modificaciones con el fin de conseguir eficiencia y logros; es allí donde resaltan los términos de desarrollo y comportamiento organizacional considerados como lo elementos esenciales del cambio. Si bien es cierto que el éxito de las organizaciones va depender del comportamiento de sus integrantes. Tal cual como lo cita Chiaveniato; (2012) “El comportamiento organizacional se refiere al estudio de las personas y de los grupos que actúan en las organizaciones”.  Hoy en día todas las empresas deben considerar en sus ambientes de trabajo el respeto del ser humano por su desempeño y por sus actitudes  y saber delegar funciones, es decir, debe proporcionar liderazgo entre sus trabajadores en cada una de las funciones que ellos desempeñen de manera tal de tener una visión que garantice profundos cambios y éxitos empresariales.

            Por otra parte el comportamiento organizacional tiene una serie de objetivos entre los cuales se pueden resaltar que debe tener una descripción del ambiente de trabajo en que se desenvuelven las personas como también lograr entender el comportamiento de sus trabajadores, es decir, tomar en cuenta sus actitudes y particularidades, del mismo modo tener una visión futurista del comportamiento de esas personas en cual de una manera muy estratégica debe lograr que dicho comportamiento sea el más deseado en el trabajo, a su vez debe tomar en cuenta las cualidades de cada uno de los trabajadores en función de las actividades que desempeña, es decir relacionar el comportamiento  con la parte de recursos humanos.

            En virtud de los objetivos mencionados anteriormente se establece que el comportamiento organizacional se basa netamente en la persona la cual brinda a una empresa o a una organización una serie de aportes que parten desde su esfuerzo, dedicación hasta la aplicación de sus conocimientos y que de manera de retribución la organización  debe brindarle una serie de incentivos que parten desde un salario, una formación en cuanto al campo en que se desempeñe, estabilidad, oportunidades de escalar pero sobretodo dos puntos que considero son muy importantes como lo son un ambiente de trabajo agradable en las que el trabajador se sienta motivado a realizar sus actividades contando con excelentes recursos para laborar y que se le dé el derecho de participar en la toma de decisiones, es decir que se tomen en cuenta sus opiniones.

            Además de describir los objetivos que toma en cuenta el comportamiento organizacional Chaveniato hace referencia a que existen tres niveles uno de ellos es la macroperspectiva; un ejemplo de ello es la zona educativa la cual es superior a las instituciones y por tal motivo le emana informaciones y a su vez puede tomar decisiones. Es decir que este nivel está basado en liderar, dar información y tomar decisiones, debido a que toma en cuenta el comportamiento del sistema organizacional como un todo. Seguidamente se tiene la perspectiva intermedia y como ejemplo tomaríamos la escuela; dicho nivel busca la socialización siendo que examina el comportamiento de los grupos y equipos de la organización y último nivel hace referencia a la microperspectiva siendo está la que toma en cuenta el comportamiento del individuo a nivel psicológico tomando como ejemplo para hacer referencia a este nivel la conducta de cada uno de los integrantes de la institución (docentes, estudiantes, administrativos y obreros).

            Ahora bien, al saber que el comportamiento organizacional hace énfasis en el ser humano es necesario resaltar que va de la mano con el desarrollo organizacional que hace énfasis en las actividades que se plantean para conseguir una meta dentro de una organización y que dichas actividades deben darse de manera coordinada todo ello con el fin de conseguir un cambio y la eficiencia organizacional. Tal cual lo plantea Chiaveniato “Es el proceso de construir y adaptar continuamente la estructura de la organización para que alcance sus objetivos y estrategias”. De acuerdo a lo planteado por el autor se puede interpretar que cada empresa debe estar sujetas a cambios y que estos deben ser planeados tomando en cuenta a sus integrantes debido a que la esencia del desarrollo organizacional es humanista. Pero muchas veces la realidad es otra siempre ha existido ese roll jerárquico en que el que toma las decisiones es el superior y luego las baja a sus inferiores y sin tomarlos en cuenta en ningún momento; es por ello que vemos hoy en día que muchas organizaciones poseen fallas porque uno solo quiere controlar a varios y resulta que es allí donde recae el gran error.

            En este orden de ideas, se pueden mencionar las etapas que comprende el desarrollo organizacional las cuales comprenden desde la infancia hasta la madurez; un ejemplo muy claro de ello es el inicio de una institución en el medio rural que empieza como escuela unitaria y que para ese momento tiene poco personal y a medida que va pasando el tiempo se va incorporando más personal hasta que se gradúa la escuela y pasa a ser escuela básica pero con la diferencia de que ya va tener más personal y más funciones que cumplir pero es allí donde muchas veces se recae en el error de que el directivo no delega funciones y todo se vuelve una burocracia, es decir,  que una sola persona va tener el poder y si en algún momento no está el directivo pues nada procede porque las decisiones dependen solo de él.

            Aunado a esta situación es necesario que todo gerente tome en cuenta las tres etapas que comprende el desarrollo organizacional con el fin de que sepa con que cuenta y cómo puede programar sus actividades es por ello que debe comenzar con un diagnóstico con el fin de tener una base de datos acerca de los recursos tanto humanos como materiales con que cuenta dicha organización; seguidamente tener unas acciones que no son más que las actividades que se formulan para mejorar el funcionamiento de la organización y finalmente una administración de programa que consiste en la ejecución de dichas actividades pero tomando en cuenta su equipo de trabajo para así delegarle funciones a cada uno de acuerdo a su desempeño.

            De igual manera es necesario establecer que el comportamiento organizacional y el desarrollo organizacional coinciden en las disciplinas las cuales parten de la psicología que se encarga del estudio de la conducta del ser humano y de sus intereses, la sociología haciendo énfasis en el estudio de la relación de la persona con su alrededor, la psicología social la cual abarca el estudio de la interacción entre las personas, la antropología con el fin de conocer la cultura de las organizaciones, es decir, sus valores y sus actitudes, la ciencias políticas la cual toma en cuenta el desenvolvimiento del ser humano en ambientes políticos y las ciencias de la comunicación debido a que siempre dentro de una organización debe haber un buen proceso de comunicación.

            En torno al ambiente de trabajo el desarrollo organizacional hace partícipe a la cultura organizacional en que se toma en cuenta las creencias y los valores de cada uno de los miembros de la organización las cuales deben ser tomadas en cuenta y respetadas para lograr así tener un buen clima organizacional en que cada integrante se sienta agradado aunque muchas veces el clima se pueda tornar enfermizo causando incomodidad y poca motivación para el desempeño de sus labores.

            Finalmente se puede concluir en que la educación hoy en día está sujeta a grandes cambio y de manera constante con el fin de formar una sociedad que sea justa y tenga el respeto entre cada uno de nosotros. El éxito de estas instituciones radica en que los gerentes deben delegar funciones a su equipo de trabajo partiendo de sus diagnóstico, que es quien le arroja con cuantos cuenta y que actitudes y habilidades tiene su personal para así poder llevar a cabo las actividades programadas que estén en pro del desarrollo de la institución teniendo una visión hacia el éxito sin necesidad de que exista la burocracia interna. También debe propiciar un clima agradable como a su vez compensar los esfuerzos de cada uno de sus integrantes de manera que se despierte el espíritu participativo.

sábado, 1 de noviembre de 2014



¿Cuál es la realidad de la evaluación institucional en nuestras escuelas?
            Hoy en día nuestro país se ha caracterizado por atravesar grandes cambios del cual no escapa el campo educativo en el que se han visto muchas innovaciones y remodelaciones partiendo desde la Ley Orgánica de Educación hasta el diseño curricular por el cual se rige todo el sistema educativo.  El diseño curricular constituye una herramienta al momento de llevar a cabo la planificación y la evaluación dentro de un aula de clase aunque cuando se toma en cuenta el termino evaluar no se debe pensar en que solo se lleva a cabo con los estudiantes puesto que cuando se habla de evaluación institucional se está hablando de la evaluación que abarca la administración educativa, el centro escolar y a los estudiantes.
            Para tal efecto, la evaluación institucional es considerada un proceso integrador que se lleva a cabo dentro o fuera de las instituciones el cual busca fomentar la calidad educativa a través de la emisión de juicios de valor para luego llegar a una toma de decisiones. Si bien es cierto, las personas que emiten estos juicios deben ser personas que tengan ética, es decir, alguien que tenga una buena conducta moral.

            Por otra parte, es necesario llevar a cabo una evaluación con la finalidad de tener una información veraz para luego tomar decisiones con respecto a la situación por la que atraviesa la institución en ese momento proporcionando herramientas básicas para la mejora de la calidad educativa.

            Debe señalarse, que más que evaluar es tener en cuenta qué persona lleva a cabo dicho proceso y bajo que valores se rige esta persona siendo que la evaluación se considera más que un proceso técnico un proceso ético ya que participan personas que emitirán juicios sobre actividades en las que participan otras personas. Por otra parte, la evaluación se rige por dos categorías la de ser objetivos y justos al momento de emitir juicios.  Por su parte la evaluación siempre va tener tres preguntas  ¿Qué evaluar? ¿Cuándo evaluar? y ¿Cómo evaluar? con las que se busca garantizar la veracidad de las metodologías que se estén empleando.
            Es también relevante señalar que la evaluación ha tenido varias posturas considerándola como un proceso sistemático integral y continuo en que se toma en cuenta las técnicas aplicadas, la capacidad del educador y la calidad de los planes aplicados para luego tomar decisiones.  Por otro lado está la apreciación de la evaluación con carácter científico siendo que se toma en cuenta la personalidad, los conocimientos y los métodos confiables de los que participan con la finalidad de conseguir una mejora continua en el proceso educativo.  Ambas posturas se fijan en que se debe interpretar los resultados obtenidos para fijar nuevas metas y reorientar las actividades.

Si bien es cierto que la educación hoy en día se ha visto sumergida en el mundo político lo que ha conllevado a que se preste para muchas irregularidades que afecta el sistema educativo dejando a un lado la calidad de la educación por pensar solo en la cantidad.  Esto ha conllevado a que muchas personas están ejerciendo cargos para los cuales no poseen ni la ética ni la preparación necesaria para llevar a cabo el cargo que desempeñan solo porque son activistas políticos que muchas veces solo tienen intereses personales obviando la verdadera ética de enseñar los verdaderos valores de la responsabilidad y la honestidad con el fin de trabajar en pro de una educación de calidad. Por tal razón muchas veces la evaluación institucional deja de ser un proceso permanente debido a que se supervisa tal cual vez, no lo toman en cuenta como un proceso integrador que busca asegurar la calidad educativa y que busca permitir la competitividad académica en la que se evalué la pertinencia, la eficiencia y la eficacia todo ello porque son llevadas a cabo por personas que solo tienen aspiraciones personales y con poco sentido de pertenencia con la parte educativa.

Además de eso, la evaluación institucional no debe verse como un proceso para solo establecer normas sino para interpretar, cambiar y mejorar la institución desde todos sus ámbitos (administrativo, obrero y alumnado) todo bajo la ética debido a que si no se aplican los verdaderos valores de un profesional evaluador se estaría incurriendo  en que la evaluación pasaría a ser un instrumento de control o de amenaza caso por el cual han pasado varias instituciones hoy en día; las cuales al momento de ser evaluadas les resaltan fijaciones e intereses políticos y muchas instituciones o en efecto su personal se ha visto afectado en cuanto a que deben apoyar el proceso y si no están de acuerdo se ven afectadas en cuanto a sus funciones dejando a un lado y sin importar si el docente o el gerente en realidad es competente o no, es decir, allí pasa a un segundo plano el juicio valorativo del desempeño del docente.
Toda institución debe tener una misión en la cual está reflejada que es lo que se quiere alcanzar y una visión del futuro para lo cual deben plantearse una serie de objetivos que conllevaran a unas actividades que serán ejecutas y finalmente evaluadas y es allí donde se hace participe la evaluación institucional siendo esta una evaluación externa que se lleva a cabo dentro de la institución para corroborar la calidad de gestión y de los resultados del trabajo realizado por la institución y dicha evaluación consta de varias etapas comprendidas en la autoevaluación, evaluación externa, divulgación de resultados y un plan de mejora. Dichas etapas no son llevadas a cabo en muchas instituciones más que todos estos casos se presentan en aquellas escuelas del entorno rural por las cuales van muy pocas veces o se podría decir que una vez al año los supervisores.  En algunos casos no se lleva a cabo ese análisis crítico o diálogo reflexivo entre los diversos actores que forman parte de la institución lo cual le compete al directivo incentivar a su personal a evaluarse si en realidad están llevando a cabo una buena gestión o solo se está cumpliendo por cumplir.
Por tal razón muchas veces la evaluación institucional deja de ser permanente debido a que se supervisa tal cual vez, no lo toman en cuenta como un proceso integrador que busca asegurar la calidad educativa y que busca permitir la competitividad académica en la que se evalué la pertinencia, la eficiencia y la eficacia todo ello porque son llevadas a cabo por personas que solo tienen aspiraciones personales y con poco sentido de pertenencia con la parte educativa.
También se ha visto que existen muchos planes y proyectos que buscan la innovación del campo educativo con el fin de la mejora de la calidad del proceso educativo y dichos planes parten de la realización de actividades que se ejecutan y que en algunos casos  no se evalúan a cabalidad con el fin de verificar si de verdad tuvo un efecto positivo.  Esto se debe a que dichos planes y proyectos no se han terminado de ejecutar cuando ya están mandando a ejecutar otro; resultando que todo queda a medias sin poder verificar si lo que se estaba ejecutando tendría buenos resultados. Se podría de decir que el campo educativo está en un constante ensayo y error de actividades que muchas veces ni se alcanzan a evaluar. 

Otro de los aspectos que también se ven dentro de las instituciones es que la parte gerencial no lleva los soportes necesarios en cuanto al seguimiento de sus trabajadores que le permitan a la hora de tomar decisiones llevar un juicio valorativo y real del desempeño en las funciones que le competa a ese personal tal es el caso de la asistencia, permisos personales, cumplimiento de actividades, desenvolvimiento con sus compañeros y muchos más aspectos que deben tomarse en cuenta para que al momento de la evaluación pueda observar que debe resaltar y elogiar en su trabajador y que deben mejorar.  Pero al no llevar cada uno de estos aspectos es donde se cae en llevar juicios falsos donde solo estaría dando una valoración por la simple observación o en algunos casos por ser familiares o allegados pues se cae en darle una valoración que muchas veces no es la más correcta y se estaría perdiendo la ética por parte de este gerente. Igualmente sucede dentro del aula puesto que muchos docentes hoy en día no llevan un verdadero control de evaluación de las actividades que se realizan con sus estudiantes y al momento de hacer los boletines informativos se estaría colocando algunas apreciaciones verdaderas y la otra parte sería un supuesto generándose de esta manera alumnos promovidos con pocas competencias para el grado a cursar y así seguir cargando con cantidad mas no con calidad.  Hoy en día a los estudiantes se les dan un sinfín de oportunidades para ser promovidos cuando pierden algunas materias  y es triste ver que muchos no logran apreciarlas o se convierten en estudiantes conformistas con la nota mínima. Pero también pasa que estos estudiantes son promovidos con la más mínima nota porque el docente no acumulo todos los registros que le permitieran dar el verdadero juicio de ser reprobado.
Es cierto que los tiempos han cambiado mucho pero muchos de esos cambios están llevando al mundo al conformismo y el facilismo perdiéndose los verdaderos valores y posturas del sistema educativo. No todos son malos porque hay proyectos muy buenos pero que no se le están dando el uso apropiado  y son manejados por personas que no están realmente lo suficientemente preparadas y por ende conllevan al fracaso y más si las actividades no pasan por una evaluación continua en la que todos los integrantes de una institución de verdad reflexiones y empiecen por autoevaluarse ellos mismos y logren ver si lo que están haciendo está bien o mal y así puedan reflexionar y corregir como también sepan aceptar sugerencias de cambio y poder de esta manera conseguir un alcance de la misión trazada por su institución.

¿Qué podemos hacer para abordar esas realidades?
Un buen resultado de las evaluaciones institucionales en cuanto a su desenvolvimiento y eficiencia de la práctica educativa nace de una buena gerencia partiendo de que es quien debe fomentar una buena integración y comunicación de todo su personal para así realizar una ejecución del trabajo educativo proporcionándole herramientas de actualización y formación permanente. A su vez manteniendo una evaluación permanente de todas aquellas actividades que se planteen.  Dicha evaluación debe partir de una autoevaluación en la que se hagan participe todos los actores de la institución realizando un análisis crítico de las actividades institucionales a fin de superar los obstáculos y tomar en cuenta los logros alcanzados para así lograr el éxito.
Otra de las etapas que se deben tomar en cuenta es de tener una evaluación externa la cual como se sabe es dirigida por un supervisor que en realidad posea una ética profesional con buena conducta moral y que tenga una buena preparación y este bien empapado de los distintos proyectos que ese estén ejecutando para que así pueda dar objetividad a lo evaluado. Un supervisor que pueda verificar que el desempeño de todos los actores cumple con las características de calidad y que todas las actividades están en concordancia con la misión, visión propósitos y objetivos institucionales garantizándole así a la sociedad calidad académica. Por otra parte, se debe tener un informe de dichas evaluaciones tanto la interna como la externa con el fin de comparar y así detallar un plan de mejoras que se realiza para el centro educativo.

De igual manera, aquel personal que tenga la función de supervisar debe considerar y tener muy presente que la evaluación debe ser útil y que se debe realizar dentro de cierto periodo respetando los valores de las personas involucradas en el proceso y a su vez realizarla con procedimientos adecuados con el fin de arrojar información confiable. Debe ser imparcial siendo que cada ente evaluado posee diversos puntos de vista y percepciones particulares, debe practicar la igualdad de trato al dirigirse a los evaluados como también poseer conocimientos claros sobre lo que está evaluando con el que pueda orientar de manera eficaz aquellas debilidades encontradas durante el proceso de evaluación. También el ente evaluador debe resaltar los puntos positivos encontrados durante la evaluación siendo que está siempre se ha visto como algo que intimida puesto que el termino evaluar no deja de ser para muchos aquel proceso en donde solo te van a encontrar lo negativo.

Otro de los puntos que ayudaría a mejorar las evaluaciones institucionales seria que se mantenga un mejor manejo de planes y proyectos, es decir, que sea ejecutados por personas que realmente se desenvuelvan en el tema y que además estos proyectos tengan un constante seguimiento para verificar si de verdad se están cumpliendo a cabalidad. En cuanto a la evaluación de los estudiantes el docente debe reflexionar en cuanto a que debe llevar todos los aspectos de cada estudiantes de una forma ordenada y en concordancia con los objetivos planteados de manera que al momento de emitir un juicio en cuanto al desarrollo del estudiante esto esté fundamentado en bases firmes y no bajo unos supuestos que finalmente conlleva a que el docente muchas veces apruebe al estudiante con una nota mínima por no tener como justificar que este debe ser reprobado.
Para lograr que exista un buen rendimiento por parte de las instituciones se debe comenzar por dejar de politizar la educación y no porque unos sean blancos y los otros rojos sino porque la verdadera educación es en la que prevalece la enseñanza  de valores para lograr formar un ciudadano que tenga una conciencia reflexiva y que en realidad tenga aspiraciones, un ciudadano que con experiencias propias pueda construir su propio futuro, un ciudadano que no sea conformista y para dicha formación se necesita que la máxima autoridad educativa se haga una autoevaluación y vea si en realidad se están cumpliendo a cabalidad los planes y proyectos emprendidos como también saber evaluar todo aquel personal que hace vida en las instituciones con el fin de verificar si en realidad son las personas más idóneas y calificadas para cumplir dichas funciones.